Me encantan los alcauciles.
Cuando recién nos casamos el Pintor y yo, no teníamos un mango. Literal.
Y él, en vez de traerme flores, me traía ramos de alcauciles.
Para siempre, en mi mente (¿o será en mi corazón?) los alcauciles están asociados al amor.


Los hiervo y una vez fríos
los como con una mezcla de aceite, limón y sal.

¿a ustedes les gustan?
¿cómo los preparan?
¿tienen en la mente alguna relación comida-amor?
¿me cuentan su historia?


Espero que tengan un gran fin de semana,
lleno de alcauciles amor,
M.


PD: gracias Vero por mis bowls, perfectos para alcauciles.
Los individuales son de Sólo para Mí