Este mes tenemos de invitada de lujo a Luisa Manau. Luisa es la encargada del diseño y armado de los eventos más lindos que se hacen en Argentina y alrededores. Además es especialista en flores (estudió en Inglaterra) escenógrafa, estudio artes del teatro y ahora estudia astrología. Todo ese mezcla increíble que es Luisa la llevó a escribir un post sobre el amarillo de la manera más original, desde la pintura (material), la psicología (mente), las emociones y lo que nos trasciende (astrología).
Junio es el mes amarillo y, además, del 21 de Mayo al 21 de Junio es el momento de Géminis en el calendario astrológico. Géminis es un signo de Aire y éste elemento en astrología suele representarse con el color Amarillo, además de que el color de Géminis es el amarillo. Géminis es el signo de las comunicaciones, de la iniciativa en los negocios, de la mente, y también de los viajes cortos, los hermanos, los idiomas, la versatilidad y de las infinitas posibilidades. Al ser el signo de los gemelos, es un signo dual, bastante complejo y contradictorio. Las personas geminianas son divertidas, amables, joviales y muy ocurrentes, pero también pueden ser mentirosas, charlatanas y superficiales.
En cuanto al color Amarillo, su simbología también es dual ya que suele relacionarse a la alegría, el optimismo y la amistad, pero también se lo puede relacionar con la ansiedad y los celos. Por supuesto que este simbolismo se basa en subjetividades basadas en lo que genera el color en la psique, cada color nos proporciona una disposición del espíritu diferente. Lo que nos atrae del Amarillo es su claridad y su alegría.
Está estudiado que cuando miramos una obra de arte, la zona amarilla va a ser la que más nos llame la atención, y eso se debe al efecto que el amarillo genera en la forma en que el ojo lo percibe, y en cómo nuestra mente procesa esa información. Antes de los Impresionistas, la luz y sombra en en la pintura Barroca se representaban con blanco y negro respectivamente, dándole mucho dramatismo y frialdad a las pinturas. En cambio, fue toda una revolución artística cuando los Impresionistas empezaron a salir a los parques a pintar ya que comenzaron a representar la luz con el color amarillo porque así es como la veían reflejada en los elementos que estaban a la luz del sol. Es decir, la inclusión del amarillo como color para representar la luz fue un momento muy importante y decisivo en la historia de la pintura. Si comparan los tipos de pinturas, se van a dar cuenta que las pinturas impresionistas son más alegres y cálidas. En contraparte, para el pintor Kandinsky, el amarillo es el color que más violento resulta para la psiquis debido a los estímulos que generan su brillo en nuestra mente, relacionándolo así con la ansiedad.
Como contaba anteriormente, más allá del efecto físico que los colores tienen en la estructura de nuestros ojos, las sensaciones que surgen a partir de ellas no son más que una interpretación subjetiva de nuestra mente. Con lo cual, lo que cada color nos genere va a depender de nuestro estado de ánimo, contexto cultural, y demás factores.
Entonces, como una sencilla forma de meditación les propongo lo siguiente como ejercicio: Deténganse unos minutos en la observación de pinturas Barrocas (Rembrandt, Rubens, Vermeer, Velázquez) vs. Impresionistas (Monet, Cézanne, Renoir) manteniéndose muy conscientes sobre el efecto que tienen en su emocionalidad. Además, pueden también contemplar pinturas de Van Gogh (post-impresionista y jugador de #colorsoloparamiamarillo por excelencia) y preguntarse ¿qué me provoca el amarillo? Anotar las emociones que van surgiendo también está bueno porque les va a ayudar a que lentifiquen y, entonces, profundicen el proceso de asimilación de esas emociones.
Como dato de color (amarillo je) y aprovechando este “bajar un cambio” para observar los efectos de los colores en nuestra psiquis, les cuento que el chakra Amarillo es el chakra del plexo solar, al cual se lo asocia con emociones como la ira, la frustración y las intuiciones. Éste chakra es el centro de energía de nuestro organismo. Cuando el chakra está en equilibrio, nos sentimos seguros, entusiasmados, tranquilos, alegres, expresivos y con autoconfianza. Depresión, frustración, duda, letargo e ira son los signos de desequilibrio de este chakra. Ahora bien, todo muy lindo pero…¿cómo lo equilibramos? Con aromas como la bergamota y la lavanda, con piedras como el topacio amarillo, ámbar, oro y ojo de Tigre, con visualizaciones de colores amarillos como la luz solar o un campo de girasoles, o con alimentos amarillos como la cúrcuma, el jengibre y la manzanilla.
¿Vieron el poder que pueden tener los colores sobre nosotros? ¿No es genial y apasionante? Anímense entonces a despertar la sensibilidad, y a estar más atentos del efecto que los colores tienen en nosotros!
Todas las fotos son de Luisa, que es nuestra corresponsal desde Inglaterra. Gracias Luisa, estoy convencida del poder del color. Me encantó tu mirada y tu punto de vista super original.
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