Silvia es una argentina que vive en México y su blog se llama Fetiches de Cartón

Le pregunté si quería ser corresponsal Sólo para Mí para contarnos como es vivir en México y eligió relatarlo a través de un chat que tuvo con su amigo cordobés Mariano Pedrozo Aristimuño, que también vive allá.

Acá va una espiadita a su chat.


Mariano -Acaba de pasar un canguro por la puerta de mi casa y no, no vivo en Australia. Es uno de esos mugrosos circos que tienen animales viviendo en condiciones lamentables (y que a estas alturas ya debieran ser ilegales) y que los sacan a exhibir por las calles. ¿Qué hace un canguro a 2 mil quinientos metros de altura, con esta contaminación y en este clima, arriba de una camioneta y en una jaula?
Silvia -¡Ay, no, qué mal!
M -Le juro que lo vi, era un canguro... ¡idéntico al Boxitracio!
S- ¿lo bueno? México jamás deja de sorprendernos. ¿Lo malo? ¡que fue con un canguro!!!!
S -De lo bueno de la sorpresa defeña, podría hablar varios días, jajaja.
M- Borghi, desde nuestros ojos extraños que todavía se sorprenden, habría que escribir un libro o algo. Rodrigo Fresán lo intentó hace diez años, pero como que no le salió o no le entendí. Pero que hay material para una antología, eso que ni qué... :-)


S- Totalmente.
Recién llegados mis hijos, después de varios medios de transporte abordados, buscando la dirección del boga que me ayudaría en lo de migraciones, me perdí. Me perdí estando enfrente. Digamos, no me ubicaba. En Rosario solo hay una diagonal, mis sentidos en aquellos momentos funcionaban en ortogonal.
Por cel, empecé a acosar a Eva para que me ayudara. Me hizo varias preguntas que mi alma histérica intentaba entender: "en qué calle estás?" ¿Cómo saberlo? en esa intersección, se juntan unas mínimas 4 o 5, ¿"viene un autobús en contraflujo?" (¿Qué sería eso? realmente es algo lógico?) Tratando de calmarme me dice: "dime qué ves!".
Volteo: un enmascarado!!!!! Lo juro. Un fortachón disfrazado, con capa y todo.  Yo casi a punto de llorar, la otra me contesta: pídele un autógrafo!!!!


M- México es una maravilla. Hasta hay palabras que desafían las leyes naturales, como "contraflujo". En México a lo sobrenatural se le puede eximir del "sobre". Tengo un amigo que persigue ovnis con su taxi. Y otro que los encuentra. Un tercero, un hermano cósmico, logró alcanzar la perfección de la puntualidad prescindiendo de los relojes, y desarrolló una teoría al respecto que se puede escribir en una servilleta de papel. A poco de llegar descubrí una fonda detrás de la catedral. Su mesero estrella -y esto dicho sin ironías, el chavo era espectacular atendiendo ocho mesas al mismo tiempo- era rigurosamente moreno y chaparrito... y se llamaba Elvis. Y ante mi incredulidad manifiesta me mostró orgullosamente su IFE (su identificación): Elvis Aarón Pérez. En el Metro de la ciudad de México hay más personajes que en cualquier circo del mundo, incluyendo un señor que estira en el pasillo de cualquier vagón una sábana repleta de vidrios y se acuesta y se revuelca sobre ellos: la India al alcance de cualquiera, con un faquir a domicilio. En una esquina de Polanco me encontré con un tipo estacionando un camello -un camello de verdad-, mientras esperaba pacientemente a que un agente de tránsito que revisaba de arriba a abajo el reglamento de tránsito -el librito que, como la Biblia, llevan a todos lados- le especificara qué punto de su vademécum policial estaba contraviniendo. He ido a fiestas en cementerios, he abrazado pirámides anteriores a Cristo mientras un indígena zapoteco de mil años hablaba en francés y cantaba canciones de Agustín Lara entre las tumbas milenarias, he visto la Magia operar en mil frentes y sé, porque me consta que aquí las cosas jamás son lo que parecen. Picasso nunca hubiera podido ser mexicano, aquí el surrealismo no requirió de nadie que lo inventara...
S- El camello seguro respetaba el mismo código que el caballo que a mi lado, cruzaba la Av. Lomas Verdes. ¡Te quiero Mariano!
M- Tu caballo y mi camello... y por qué no, nuestro canguro... :-) Yo también te quiero Borghi, aunque sea cordobés y vos tan rosarina.... :-)
S- ¡oh, no haberlo dicho!


Gracias Silvia por compartir con nosotros esta historia
y te vamos a visitar para ver más fotos, historias y recetas de mi México querido.